Novedades en la detección de cáncer de mama

 

Autora: Ariel Cantoral Sánchez

El cáncer más común observado en mujeres a nivel mundial es el de mama (Moreno y Herrera, 2019) y en México este representa la primera causa de muerte por cáncer en mujeres. En los últimos años, el número de fallecimientos debido a esta enfermedad ha aumentado de forma alarmante, principalmente, por el retraso en el inicio del tratamiento; esta es la razón principal por la que, la detección temprana se ha convertido en la pieza central para el control de este tipo de cáncer, buscando mejorar así el pronóstico y la supervivencia de quienes lo padecen (INSP, 2019) (INSP, 2017).

 

Diagnóstico oportuno

El autoexamen de mamas es el chequeo que se realiza uno mismo en casa para buscar cambios o problemas en el tejido mamario, es necesario destacar que este no sustituye a un examen mamario realizado por un médico (examen de mama clínico) o una mamografía para la detección; es decir, este autoexamen ayuda a complementar los análisis para detección de cáncer de mama, pero no los puede reemplazar (Mayoclinic, 2020).

Por otro lado, la mamografía consiste en una serie de imágenes de rayos X de baja dosis que se utiliza como exploración diagnóstica de los senos y es el método principal para detectar el cáncer de mama en una etapa temprana (FDA, 2021); sin embargo, este tipo especial de radiografía no se debe realizar de forma continua o rutinaria por lo que está indicado que se haga una vez al año en mujeres mayores de 40 años (INSP, 2019). Debido a que este procedimiento no se debe utilizar de forma constante o en adultos jóvenes, recientemente han surgido otras alternativas y proyectos que pretenden superar estas dificultades. Tal es el caso de los sostenes inteligentes (Moreno y Herrera, 2019). 

 

Innovación

Los desarrolladores de sostenes inteligentes han buscado diseñar sujetadores equipados con sensores para detectar eficazmente el cáncer de mama de forma temprana, cómoda y sin riesgo para la salud (BIOCOM AG, 2019). Tal es el caso de Eva, startup mexicana que comenzó en 2016 con el desarrollo de un brasier inteligente con el fin de ayudar a las mujeres a detectar anomalías relacionadas con el cáncer de mama (Medina, 2019), el cual consistía en detectar con base en inteligencia artificial y termografías, si una mujer desarrollaba o no algún tipo de tumor (Campos, 2017).

Un ejemplo parecido y reciente de este tipo de producto es SmartBra, realizado por estudiantes universitarios de Suiza en asociación con la startup IcosaMed. A diferencia de la tecnología de detección de cáncer existente que utiliza radiación, esta tecnología emite ondas de ultrasonido para realizar exploraciones ecográficas en busca de células potencialmente cancerosas (Healthcare-in-europe.com, 2020).

Dentro de este ámbito de tecnología de diagnóstico inusual o innovadora, otra propuesta interesante surgió en el año 2018 cuando científicos del Departamento de Ciencia e Ingeniería de Biosistemas del Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zúrich (ETHZ), publicaron el desarrollo de un tatuaje biomédico que usa tinta bio sensible y cambia de color al detectar niveles de calcio elevados en la sangre, asociado a diferentes tipos de cáncer, incluido el de seno (Tastanova et al., 2018) (Dark Daily, 2021).

 

Limitaciones

Si bien este tipo de productos son muy prometedores, hoy en día aún no se encuentran disponibles para el público en general, ya sea porque siguen en etapas tempranas de desarrollo o porque sus creadores han modificado su aplicación. En el caso de Eva, los fundadores se dieron cuenta de que no estaban cumpliendo con la misión original, que era salvar la mayor cantidad de vidas posibles, simplemente por el precio de venta del dispositivo, hubiera sido un producto que solo podría utilizar el 0.01% de la población; por lo tanto, en 2020, el proyecto se reinventó con la implementación de cabinas para realizar la exploración de la mama a través de la creación de un mapa térmico mediante luz infrarroja (Arcia, 2020); y actualmente están enfocados en la implementación de un sistema PACS, proveniente de las siglas en inglés de Picture Archiving Communication System, es decir, sistemas para archivo y comunicación de imágenes, que tiene como principal función la agilización de los procesos de obtención, gestión, distribución y almacenamiento de imágenes médicas (radiografía, tomografía, resonancia magnética, etc.),  lo cual busca beneficiar tanto al personal de salud, como al administrativo y desde luego, a los pacientes (Eva, 2021).

 

Referencias