Los probióticos al beneficio de la salud

 

Autora: Ximena Ramírez López

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los probióticos se pueden definir como microorganismos vivos que, si se administran en dosis correctas, tienen un efecto positivo en la salud de las personas (Garrote y Bonet, 2017). Pueden ser adicionados en varios productos como lo son alimentos y suplementos alimenticios (NIH, 2019).

¿Qué son los probióticos?

Los probióticos son microrganismos que están en forma de levaduras o bacterias. Comúnmente, algunas de estas bacterias son: lactobacilos, bifidobacterias, saccharomyces, estreptococos y bacilos (NIH, 2022). Estas se encuentran de manera natural en el sistema de la persona y son muy beneficiosos para el sistema digestivo (Collins, 2020). Este efecto beneficioso se obtiene si los probióticos cumplen con los siguientes requisitos (Kechagia, et al., 2013):

  • Resistencia a la bilis y los ácidos: para que pueda ser suministrado por la vía oral.

  • Adhesión a la superficie de la mucosa y a las células epiteliales: Esto es algo muy importante ya que se puede controlar la respuesta inmune, así como la prevención del crecimiento de algunos patógenos.

  • Actividad antimicrobiana: en contra de bacterias que tengan un efecto negativo en la salud de la persona.

Mecanismo de acción de los probióticos

Dependiendo del probiótico que se administre, este tendrá mecanismos de acción diferentes, por ejemplo (Garrote y Bonet, 2017):

  1. Lumen intestinal: interactuan de manera directa con la microbiota intestinal. Inhiben algunas bacterias con efecto negativo en el organismo de las personas o aumentan la cantidad de bacterias con algún efecto positivo.

  2. Mucosa y células epiteliales: contribuyen en el fortalecimiento de la barrera intestinal, es decir, en caso de que microorganismos patógenos quieran entrar al intestino, los probióticos ayudan a que estos no pasen. Asimismo, previenen que algunos alimentos o microorganismos dañen a la mucosa

  3. Cerebro y sistema inmune: al ser ingeridos, interactúan con macrófagos y algunas células encargadas de la respuesta inmune. Esto con el objetivo de aumentar la generación de linfocitos y se fortalezca el sistema inmunológico.

Productos con probióticos

En el mercado, existen una gran variedad de productos que contienen probióticos. Entre estos, los más populares son productos fermentados como la leche, queso, helado, mantequilla y yogurt. Asimismo, existen algunos cereales y jugos ya que se ha encontrado que estos son una buena vía de administración (NIH, 2022).

Lo que es de suma importancia tener en consideración es que, al momento de añadir a los microorganismos al alimento, estos deben de conservar sus propiedades para asegurarse de que en verdad representan un beneficio a la persona que los consumen. Esto incluye tener en cuenta el empaque y el tiempo que se puede dejar guardado antes de que su efecto benéfico se vea disminuido (Kechiaga, 2013).

Comúnmente, cuando se piensa en microorganismos, se cree que estos tienen un efecto negativo en la salud de las personas. Sin embargo, si estos se adicionan en las concentraciones adecuadas, estos tienen un efecto benéfico ya que pueden potenciar la respuesta natural del cuerpo. Se encuentran en una gran variedad de alimentos y por esta razón, su uso va en aumento.

Referencias